Expertos de los Estados Unidos estudiaron los datos de casi 100 mil mujeres estadounidenses y llegaron a la conclusión de que los refrescos duplican la probabilidad de desarrollar cáncer de intestino.
Los científicos utilizaron datos recogidos por los servicios médicos y sociales de Estados Unidos como parte del proyecto NHS-II (Nurses Health Study). Los participantes del proyecto acordaron monitorear constantemente su salud y hábitos. Las observaciones duraron unos 24 años.
El análisis de los datos mostró que el consumo de bebidas carbonatadas azucaradas es un factor de riesgo significativo para las mujeres. Si bebían dos o más refrescos al día, su riesgo de desarrollar tumores intestinales aumentaba más de 2,2 veces.
También es peligroso beber refrescos azucarados en la infancia y la adolescencia. Aquellos que bebieron muchos refrescos entre las edades de 13 y 18 tenían un 32% más de probabilidades de desarrollar tumores. Además, el riesgo no disminuyó si dejaban de beber tales bebidas en la edad adulta.
Los científicos creen que los refrescos pueden acelerar el crecimiento de microbios peligrosos en los intestinos, contribuir a la obesidad y alterar la integridad de las paredes intestinales.
