El presidente interino de Perú, Manuel Merino, renunció a menos de una semana de su nueva administración, luego de una noche de protestas pidiendo su destitución y una posterior represión policial que dejó al menos dos muertos y decenas de heridos.
La última sacudida política se produce cuando Perú lucha contra la pandemia del coronavirus y lo que se espera sea su peor contracción económica en un siglo.
La gente salió a las calles para celebrar la partida de Merino el domingo, ondeando banderas, coreando y golpeando ollas, aunque la noticia hunde a Perú más profundamente en la incertidumbre y el desorden legal mientras los legisladores ahora luchan por quién tomará su lugar.
Se espera que el Congreso realice una segunda votación por la noche después de que una primera votación no logró obtener el apoyo de la mayoría para que la legisladora de izquierda y defensora de los derechos humanos Rocío Silva-Santisteban sea designada presidenta interina.
Una tensa calma prevaleció en la capital, Lima, mientras los peruanos esperaban una decisión sobre quién sería el próximo presidente.
“Merino ha renunciado porque tiene las manos manchadas de sangre, con la sangre de nuestros hijos”, dijo Clarisa Gómez, una de las que acudió a celebrar la salida de Merino, al tiempo que agregó que los legisladores que lo pusieron en el poder también deben pagar.
El Congreso dominado por la oposición votó el lunes pasado para destituir al antecesor de Merino, Martín Vizcarra, como presidente, por acusaciones de soborno que él niega.
En un discurso televisado, Merino, el exjefe del Congreso que había liderado el impulso para acusar a Vizcarra, pidió a su gabinete que se quedara para ayudar en la transición.
“Quiero que todo el país sepa que renuncio”, dijo Merino en el discurso del domingo. Añadió que la medida era "irrevocable" y pidió "paz y unidad".
La renuncia de Merino siguió a una oleada de políticos que lo instaron a renunciar, citando la violencia contra los ciudadanos del país.
El actual presidente del Congreso, Luis Valdez, dijo el domingo temprano que todos los partidos políticos de la legislatura habían acordado pedir la renuncia “inmediata”.
“Debemos anteponer la vida del pueblo peruano”, dijo Valdez, quien planea renunciar.
