La parte estadounidense informa que los ataques alcanzaron objetivos utilizados por grupos armados ilegales que reciben apoyo activo del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
A pesar del anuncio de los Estados Unidos de América, los medios estatales sirios no tienen prisa por confirmar el hecho de los ataques a la ciudad de Deir ez-Zor (en la gobernación nororiental de Deir ez-Zor). La parte estadounidense señala que se llevaron a cabo ataques precisos, destinados a reducir la escalada y minimizar las posibles bajas colaterales.
Se aclara que la operación fue acordada a nivel del presidente Joe Biden (Joe Biden), ya que los golpes eran necesarios para proteger a las tropas estadounidenses y eran una respuesta al ataque a las mismas ocurrido el 15 de agosto.